Zidane se movía con la armonía de un solo ser con el balón. Con una maestría y sofisticación técnica, él orquestaba el juego con pasión desbordante. Sus pases eran de una perfección pasmosa, como pinceladas https://haseebaidj630553.wizzardsblog.com/38539056/razones-ocultas-del-cabezazo-de-zidane