Se trata de la última carta del primer ciclo del tarot y representa ‘‘el cierre de una etapa, de transición y de preparación al cambio. Nos recuerda tomar el tiempo necesario para reflexionar, valorar todo lo que hemos cumplido y preguntarse lo que queremos cambiar’’, explica. Reencuentros afortunados: Una persona https://elbertj990lsz0.sharebyblog.com/profile